sábado, 20 de febrero de 2010

El cambio climático amenaza a los Juegos Olímpicos de Invierno

Canadá (17/02/2010)

Las temperaturas han llegado este fin de semana a ocho grados, lo que afectó la competencia del descenso masculino,suspendida porque la nieve estaba prácticamente derretida.

En Vancouver, sede de los XXI Juegos Olímpicos de invierno, la falta de frío ha obligado a los organizadores a posponer varias de las competencias más importantes. Las montañas se derriten y en helicópteros llevan toneladas de nieve para poder, al menos, continuar con el desarrollo del evento.

Al parecer el cambio climático acecha contra el histórico evento, ya que según los organizadores este ha sido el invierno más caluroso que se haya registrado.

Las temperaturas han llegado este fin de semana a ocho grados, lo que afectó la competencia del descenso masculino,suspendida porque la nieve estaba prácticamente derretida.

Las altas temperaturas obligaron a los organizadores a llevar nieve artificial a la colina de Cypress Hill, sede de las competiciones de snowboard y freestyle, una nueva disciplina en los Juegos.

También, con helicópteros y excavadoras, más de 780 toneladas de nieve trasladan a diario a esa montaña, donde el color que predomina es el marrón y el verde, en vez del blanco.

Pero lo que más preocupa es que los 30 meteorólogos contratados por el Comité organizador pronostican para los próximos días más calor y lluvias (no nieve) lo que podría arruinar todo el trabajo hecho.

Vancouver es una ciudad que está en la costa oeste de Canadá, zona atacada por el calor, mientras que en el este los ciudadanos se refugian de poderosos temporales de nieve, que forman parte de los vientos del Polo Norte que también afectaron a Estados Unidos.

Pese a todo, el titular del Comité Organizador de Vancouver 2010, John Furlong, aseguró: “La situación está bajo control y todo estará listo para el desarrollo de los Juegos”.

Las olimpiadas del invierno en esta ciudad canadiense no empezaron con buen pie. El calor amenaza las competencias y el luto por la muerte del atleta georgiano de luge (trineo), Nodar Kumaritashvili, en los entrenamientos horas antes de la inauguración, amargó el sabor que históricamente ha tenido este tipo de eventos.